Fuente: James Nuñez Dueñas
Durante
las dos últimas décadas en Colombia se ha puesto de moda hablar de la
transición que deben sufrir algunas entidades del Estado tanto a nivel nacional
como local, la disminución del gasto público, el cual es entendido como el acto
de recortar entidades del gobierno como Ministerios, Unidades Administrativas Especiales
y descentralizadas como reza el artículo 334 de la constitución … La
sostenibilidad fiscal debe orientar a las Ramas y Órganos del Poder Público,
dentro de sus competencias, en un marco de colaboración armónica… Es así que,
los recursos deberían irse a los fondos destinados para la financiación de
proyectos y programas gubernamentales para darle bienestar a los colombianos.
Esta práctica suele buscar reducir el déficit presupuestal, ya sea mediante la
eliminación de entidades del Estado y que este sea más productivo en su
organización.
¿Pero
por qué en las últimas dos décadas se ha puesto de moda hablar del cambio de
Ministerio para la Policía Nacional? ¿Qué implicaciones tendría frente a la
seguridad pública y ciudadana? ¿Perdería sostenibilidad? Primero, debemos tener
claro que la Policía Nacional de Colombia es un cuerpo de seguridad nacional
encargado de la prevención y detección de infracciones, investigación,
seguridad ciudadana, así como la aplicación de la ley, y el control del tráfico
y los accidentes. En la actualidad la Policía está subordinada al Ministerio de
Defensa y dirigida por el director general quien es designado por el presidente
de la República. La misión de la Policía es estar a cargo de asegurar el orden
público, prevenir y perseguir los delitos… Esto se logra a través de la
realización de patrullajes, investigaciones, capturas y custodia de criminales,
entre otras funciones. Además, la Policía se esfuerza por mantener una
comunicación con la comunidad.
Desde
el año 2006, se vienen haciendo estudios para cambiar a la Policía Nacional de
Ministerio, desde el grupo de expertos donde participó Alfredo Rangel y otros
consultores sobre la conveniencia de que la Policía Nacional saliera del
Ministerio de Defensa, pero a la fecha no ha pasado nada, estos estudios
terminan engavetados (no se sabe cuánto dinero nos ha costado). Pero ¿Cuáles
serían las implicaciones de la salida de la Policía del Ministerio de Defensa? Frente
a esta pregunta y realizando un primer recorrido se podría decir que no tiene
ninguna implicación para el país; ahora bien, realizando un estudio más a
fondo, tendremos que concebir que la salida de la Policía del Ministerio asumirá
una serie de implicaciones, en primer lugar, el Ministerio de Defensa tendrá
que adjudicarse una mayor responsabilidad en la seguridad nacional (fronteras y
apoyo para desarticular grupos organizados al margen de la Ley), lo que
significa que habrá que aumentar su presupuesto para financiar la seguridad
fronteriza.
Segundo,
significará una importante transformación en el funcionamiento del Ministerio.
Esto podría representar que el Ministerio de Defensa se concentrará
principalmente en el desarrollo de la Fuerza Militar y la gestión de las operaciones
militares, en lugar de ser involucrado en asuntos relacionados en materia de
seguridad ciudadana.
Tercero,
La Policía, al no contar con el apoyo de las Fuerzas Militares puede enfrentar
un aumentar en los niveles de violencia contra sus uniformados, así como en las
áreas rurales debido a la disminución de la presencia militar en estos sitios; el
Estado estaría enfrentando un resquebrajamiento de autoridad y la reducción en
la eficiencia de la aplicación de la ley. Cuarto, una mayor desvinculación entre
los departamentos de seguridad y defensa de Colombia. Quinto, posibilidad de reducción
en el intercambio de información entre la Policía Nacional y las Fuerzas
Militares.
Ahora
bien, en materia de Seguridad Ciudadana ¿Qué implicaciones tendría frente a la
seguridad pública y ciudadana? La Policía es una de las instituciones que tiene
que crecer en el país, se debería pensar que esta institución debe sobre pasar
los doscientos mil miembros entre personal uniformado, auxiliares y civiles que
prestan su servicio y así aumentar su presencia en los mil ciento dos
municipios, permitiendo la descentralización de la seguridad de los ciudadanos
a través de un enfoque más localizado (necesidad vs personal). El nuevo
Ministerio tendrá que crear estrategias para realizar el monitoreo de la
criminalidad en el país, la necesidad de personal, y herramientas que se deben
utilizar. Así mismo, el crimen en Colombia es un asunto que preocupa a las
autoridades del país.
El
número de homicidios ha disminuido considerablemente en los últimos años, sin
embargo, el país sigue siendo uno de los más inseguros de Latinoamérica. La
criminalidad en Colombia ha percibido en los últimos tiempos qué, cambios de
estrategias permiten ser invisibles frente a las autoridades ya que la cifra de
homicidios puede disminuir, pero, la cantidad de secuestros y extorciones
aumentar. Además, otros delitos como la violencia intrafamiliar y la corrupción
son más comunes.
Por
otro lado, expertos hablan de que la salida de la Policía del Ministerio de
Defensa, es para desmilitarizarla, Así las cosas, se tendría que entender qué ¿La
policía esta militarizada? Frente a este planteamiento, ya que es un término
muy amplio que abarca una gran variedad de conceptos. En su sentido más amplio,
el término se refiere al uso de tecnologías, tácticas, armamento y equipo usado
por la Policía para aumentar la eficiencia al vigilar y responder a situaciones
de violencia o criminalidad[1]. Este planteamiento de
militarización de la Policía se ha querido por necesidad de una fuerza de
seguridad más efectiva y contundente frente al delito[2]. En este entendido, cuando
se habla de la militarización de la Policía se refiere a una política de
permitir que la policía adopte prácticas y armas normales del ejército, el
objetivo de esta política generalmente es que la policía sea más eficaz en su
trabajo y se sienta más seguro al hacerlo.
Como
conclusión, el cambio de ministerio de la Policía de Colombia es una decisión
que tiene que analizar el gobierno de turno, con el fin de que la salida del Ministerio de Defensa sea para mejorar los procesos en
materia de seguridad y la eficiencia de la fuerza. El nuevo ministerio donde
estará la Policía se encargará de la administración, el control y la dirección
de la Policial, así como de engranar el trabajo con las Fuerzas Militares, la
Fiscalía y el Ejecutivo. Es preciso aclarar que el gran peligro que corre la
Policía es que se quiera cambiar su estructura, como es volverla municipal, que
abriría una caja de pandora para la politización como sucedía en los años 50, o
se quiera cambiar el régimen pensional que podría aumentar los niveles de
corrupción, lo que es cierto, es que el camino es largo, los consultores, sino
tienen experiencia en el tema podrían resquebrajar una institución que se ha
formado por más de dos siglos.
James Nuñez Dueñas
Investigador
aletheiainvestigaciones@gmail.com